Por Luis Martínez Alcántara

Zacatecas se convirtió en el estado número 17 en despenalizar el aborto en México, permitiendo la interrupción voluntaria del embarazo hasta las 12 semanas de gestación. La decisión fue aprobada por el Congreso local con 21 votos a favor y 6 en contra, en un contexto marcado por protestas de grupos provida que intentaron bloquear la sesión legislativa. 

Esta reforma se alinea con un fallo de la Suprema Corte de Justicia de la Nación que declaró inconstitucionales las penalizaciones por abortar, reafirmando los derechos reproductivos.

Con esta aprobación, Zacatecas se une a una lista creciente de estados que han despenalizado el aborto, reflejando un cambio significativo en la legislación mexicana. Hasta ahora, los estados que han adoptado leyes similares son: Ciudad de México, Oaxaca, Hidalgo, Veracruz, Puebla, San Luis Potosí, Chiapas, Baja California, Michoacán, Aguascalientes, Querétaro, Tlaxcala, Guerrero, Sinaloa y Coahuila. 

Este avance es parte de un movimiento más amplio conocido como “marea verde”, que busca garantizar los derechos sexuales y reproductivos en todo el país.

La despenalización del aborto ha sido un tema controversial en México, donde aún persisten estigmas y barreras para acceder a servicios de salud reproductiva. A pesar de los avances legislativos, muchas mujeres enfrentan dificultades para ejercer su derecho al aborto debido a la falta de información y el acceso limitado a servicios médicos. La situación varía significativamente entre diferentes estados, lo que genera desigualdades en el acceso a la salud.

La aprobación en Zacatecas es vista como un hito por activistas y organizaciones feministas que han luchado por estos derechos durante años. La celebración fuera del recinto legislativo tras la votación refleja la importancia de este logro para muchas personas que abogan por la autonomía sobre sus cuerpos. Sin embargo, legisladores opositores expresaron su descontento, argumentando que no se escucharon todas las voces en el debate sobre este tema.