Por Luis Martínez Alcántara

Francisco Garduño Yáñez permanecerá como titular del Instituto Nacional de Migración (INM), decisión que refleja la confianza depositada en su liderazgo en temas migratorios. Aunque se había anticipado su relevo por Sergio Salomón Céspedes Peregrina el 16 de diciembre, este cambio no se concretó y no hubo anuncio oficial al respecto.

La presidenta Claudia Sheinbaum ha expresado su respaldo a Garduño, reconociendo su experiencia en la gestión de asuntos migratorios, especialmente en un contexto internacional complejo. Su continuidad al frente del INM busca mantener la estabilidad y eficacia en las políticas migratorias del país.

El liderazgo de Francisco Garduño ha sido clave en la coordinación con autoridades internacionales, especialmente con Estados Unidos, para abordar los desafíos migratorios de manera conjunta. En este contexto destaca que Garduño y su equipo conocen bien a la administración Trump, pues estuvieron tratando con ellos el tema directamente al inicio de la gestión del presidente Andrés Manuel López Obrador y su experiencia y conocimiento en la materia han facilitado el diálogo y la cooperación entre ambos países, contribuyendo a una gestión migratoria más eficiente y humana.

Durante su gestión, Garduño implementó medidas significativas para modernizar el INM. Un ejemplo destacado es la modernización de los procesos en materia archivística, que ha permitido la digitalización de expedientes y la donación de toneladas de papel al Archivo General de la Nación para la elaboración de libros de texto gratuitos. 

La decisión de mantener a Francisco Garduño al frente del INM es un reconocimiento a su labor y compromiso con la institución. Su permanencia garantiza la continuidad de las políticas migratorias actuales, enfocadas en la protección de los derechos humanos y la modernización de los procesos migratorios en México.