Por Luis Martínez Alcántara 

 

CIUDAD DE MÉXICO.- En los últimos dos días, la represión en Venezuela ha dejado un saldo de 12 muertos, según informó la Fiscalía General. Entre los fallecidos se cuentan 11 civiles, incluidos dos menores de edad y un militar. Las fuerzas de seguridad venezolanas han sido acusadas por activistas de utilizar armas de fuego contra los manifestantes.

Alfredo Romero, director de la organización Foro Penal, calificó la situación como alarmante, destacando la preocupación por el uso de armas de fuego en las manifestaciones y la cifra de muertos en un solo día.

La represión también ha resultado en 749 detenidos, entre ellos menores de edad. Un caso que ha llamado la atención es el de una joven de 16 años y su prima de 25, quienes fueron arrestadas aunque no estaban participando en las protestas.

Entre los heridos se encuentran 84 civiles y 23 militares. La comunidad internacional y las organizaciones de derechos humanos han expresado su preocupación por estos hechos y han instado al gobierno venezolano a respetar los derechos de los manifestantes.

Las protestas en Venezuela se desencadenaron después de que el Consejo Nacional Electoral, afín al chavismo, declarara a Nicolás Maduro como ganador de las elecciones presidenciales. La oposición y una parte significativa de la población venezolana han rechazado estos resultados, argumentando fraude electoral. Las manifestaciones han escalado en violencia, con enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas de seguridad. La situación se ha vuelto especialmente tensa en ciudades como Caracas y Valera.

En medio de esta crisis, la aerolínea panameña Copa Airlines suspendió sus vuelos desde y hacia Venezuela. En México, venezolanos residentes en la Ciudad de México se manifestaron frente al Ángel de la Independencia en apoyo a la oposición venezolana. Además, se ha reportado la detención de un ciudadano mexicano, Manuel Antonio Peña Rumbos, acusado de terrorismo y actualmente encarcelado en el estado de Trujillo.

El presidente Nicolás Maduro responsabilizó a la oposición, específicamente al candidato Edmundo González Urrutia y a la líder opositora María Corina Machado, de la violencia y los disturbios. La Fuerza Armada Nacional Bolivariana reafirmó su lealtad y apoyo incondicional a Maduro, calificando las protestas como un intento de golpe de Estado.