El presidente, Andrés Manuel López Obrador, expresó su descontento por el aplazamiento, por cuarta vez, de la sentencia de Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad Pública de México, hallado culpable de narcotráfico y corrupción en Estados Unidos.

“Me sorprende que sigan posponiendo el veredicto final, como si fueran jueces de aquí, que archivan expedientes o los guardan”, comentó López Obrador durante su conferencia matutina en Palacio Nacional.

El Ejecutivo federal evitó dar su opinión sobre la pena que debería recibir García Luna, quien enfrenta una condena mínima de 20 años de cárcel o una posible cadena perpetua, señalando que la pena “corresponde a los jueces”.

López Obrador también destacó la gravedad del caso, recordando que durante el gobierno de Felipe Calderón, del cual García Luna fue un funcionario clave, las organizaciones criminales y el narcotráfico se infiltraron en el gobierno, resultando en lo que describió como un “narcogobierno”.

El tabasqueño mostró su apoyo a la posibilidad de que García Luna se convierta en testigo protegido en Estados Unidos, sugiriendo que podría proporcionar información valiosa que ayudaría a prevenir futuros casos similares.

“Sería bueno que hable. Independientemente de que le rebajen la pena, ayudaría mucho al país para que nunca jamás vuelvan a repetirse esas cosas”, mencionó.

Desde 2012, García Luna residía en Florida, Estados Unidos, hasta su arresto en Dallas, Texas, en 2019. Permaneció encarcelado hasta su juicio en enero de 2023. Recientemente, un juez del Tribunal Federal del Distrito Este de Brooklyn aceptó posponer su sentencia hasta el 9 de octubre, a petición de sus abogados.

García Luna, de 54 años, fue declarado culpable en febrero de 2023 de cinco cargos: participación en la dirección de una empresa criminal, conspiración para la distribución de cocaína, conspiración para distribuirla en Estados Unidos, conspiración para la importación de esta droga y prestar falso testimonio a las autoridades estadounidenses al solicitar la nacionalidad.