El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) informó que la inflación general anual en México alcanzó el 5.57% en julio, continuando su tendencia al alza por quinto mes consecutivo.

El Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) mostró un incremento del 1.05% en comparación con el mes anterior.

En julio del año pasado, la inflación mensual fue del 0.48%, mientras que la tasa anual se situó en 4.79%. El índice de precios subyacente, que excluye productos de alta volatilidad y es un indicador más estable de la inflación, aumentó 0.32% en tasa mensual y 4.05% en tasa anual.

El índice de precios no subyacente, que incluye productos como alimentos frescos y energéticos, registró un incremento del 3.29% mensual y 10.36% anual.

Dentro del índice subyacente, los precios de las mercancías aumentaron 0.12% y los de servicios 0.55% en comparación con el mes anterior.

Por otro lado, los precios de los productos agropecuarios subieron 5.00% y los energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno crecieron 1.69% a tasa mensual.

El índice de precios de la canasta de consumo mínimo, que abarca 176 productos y servicios básicos, experimentó un aumento del 1.22% mensual y del 5.60% anual.

En el mismo periodo de 2023, estos incrementos fueron del 0.24% y 4.36%, respectivamente.

Los precios al consumidor en México cerraron 2023 con una subida del 4.66%, después de una tasa del 7.82% en 2022, que representó el mayor aumento en 22 años para un fin de año.

En el sector agropecuario, las frutas y verduras registraron una inflación anual del 23.55% en julio, marcando ocho meses consecutivos con tasas de dos dígitos. Este incremento es el más alto desde agosto de 2017.

En cuanto a los energéticos, la inflación anual fue del 9.17%, con una aceleración por octavo mes consecutivo y la tasa más alta desde diciembre de 2021.

Entre los productos con mayor aumento mensual, el jitomate destacó con un alza del 33.34% en julio respecto a junio, seguido por la cebolla (25.68%), la naranja (18.57%) y el aguacate (17.01%).

En el sector energético, el gas doméstico LP tuvo un repunte mensual del 6.70%, mientras que la gasolina de bajo octanaje subió un 1.14%.