Por Luis Martínez Alcántara
La disidencia petrolera, encabezada por Juan Martín Morales Barrera, trabajador activo de PEMEX y líder nacional del movimiento Fuerza Oro Negro, desconoció públicamente a Ricardo Aldana Prieto como secretario general del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM).
Morales Barrera acusó un contubernio entre la actual dirigencia sindical y el titular de la Secretaría del Trabajo, Marath Baruch Bolaños López, al validar un proceso de elección que calificó como antidemocrático y plagado de irregularidades. El movimiento exige una transformación sindical profunda que erradique la corrupción y las prácticas antidemocráticas dentro del STPRM.
Juan Martín Morales afirmó que la elección que llevó a Aldana Prieto a la dirigencia nacional estuvo marcada por la ilegalidad, acusándolo de ser un empleado de confianza que no representa los intereses de los trabajadores. “Buscamos justicia sindical, que el sindicato de cuates desaparezca y recuperar nuestro STPRM”, declaró el líder de Fuerza Oro Negro. En este sentido, exigió que Aldana Prieto regrese a su puesto de confianza en PEMEX y se convoque a un nuevo proceso electoral transparente.
El movimiento disidente hizo un llamado al Senado y la Cámara de Diputados para observar y participar activamente en este proceso de transformación, enfatizando la necesidad de eliminar las viejas prácticas de corrupción sindical. Morales Barrera también pidió jubilar a los funcionarios sindicales que cumplen con los requisitos de antigüedad, pues estos, según sus palabras, bloquean la democracia y los procesos de ascenso dentro del sindicato.
Entre las principales exigencias de Fuerza Oro Negro destacan la reposición del proceso electoral para renovar el Comité Ejecutivo General y el seguimiento a las investigaciones contra funcionarios sindicales involucrados en actos delictivos. “Exigimos justicia para el gremio petrolero y cárcel para quienes hayan incurrido en corrupción”, señaló Morales Barrera, reafirmando el compromiso de la disidencia con acciones legales tanto nacionales como internacionales.
Morales Barrera concluyó subrayando que no buscan crear un nuevo sindicato, sino transformar el STPRM para convertirlo en una institución democrática, transparente y al servicio de los trabajadores. “Estamos en pie de lucha para recuperar nuestro sindicato y poner fin al abuso de poder”, finalizó.