El conductor del Cybertruck que explotó frente al Trump International Hotel en Las Vegas se disparó en la cabeza antes de la detonación del vehículo, según las autoridades locales. En una rueda de prensa, el alguacil del condado de Clark, Kevin McMahill, informó que la oficina del forense descubrió una herida de bala en la cabeza del hombre, quien aparentemente se disparó antes de que el automóvil estallara.
El alguacil señaló que, debido a que el arma fue hallada cerca de los pies del conductor, las autoridades consideran que se trató de un disparo autoinfligido. Se cree que el responsable es Matthew Livelsberger, un soldado estadounidense de 37 años, aunque aún se esperan los resultados de las pruebas de ADN para confirmar su identidad. Sin embargo, las identificaciones y los tatuajes encontrados en el vehículo ofrecen una fuerte indicación de que es él.
Livelsberger había rentado el Cybertruck a través de la plataforma Turo en Colorado, y la Policía encontró en el vehículo una combinación peligrosa de tanques de gasolina, cilindros de gas, combustible para acampar y morteros de pirotecnia de alto calibre, lo que causó la explosión.
La detonación dejó heridas a siete personas que se encontraban cerca del hotel, aunque no se reportaron muertes adicionales. Las autoridades de Las Vegas también mencionaron que la explosión ocurrió tras el ataque de Shamsud-Din Bahar Jabbar en Nueva Orleans, un incidente donde una furgoneta embistió a una multitud, matando a al menos 14 personas.
El FBI descartó en una conferencia en Nueva Orleans que haya una conexión entre ambos incidentes, aunque ambos hombres, Livelsberger y Jabbar, compartieron la misma base militar en Carolina del Norte, conocida como Fort Bragg. A pesar de esto, las autoridades aún no descartan la posibilidad de una relación entre los hechos.