Por Luis Martínez Alcántara 

 

CIUDAD DE MÉXICO.- Estados Unidos asestó un golpe significativo al régimen de Nicolás Maduro al incautar un avión que pertenecía al presidente venezolano. Mientras tanto, el régimen de Maduro intensifica su persecución política al emitir una orden de captura contra Edmundo González Urrutia, un opositor que desafía la legitimidad del gobierno actual.

La incautación se llevó a cabo el lunes 2 de septiembre, cuando el Departamento de Justicia de Estados Unidos confiscó un jet privado Dassault Falcon 900EX, con las siglas T7-ESPRT, en República Dominicana y lo trasladó a Florida.

Según el fiscal general Merrick Garland, la aeronave, valorada en 13 millones de dólares, fue adquirida a través de una empresa fantasma en violación de las sanciones impuestas por Washington. Este acto es parte de una serie de medidas de presión contra el régimen, cuyas elecciones más recientes no han sido reconocidas por la comunidad internacional debido a denuncias de fraude.

El avión, utilizado por Maduro en varios viajes, incluida una reunión en San Vicente y las Granadinas en diciembre pasado, fue inmovilizado mientras estaba en mantenimiento en Santo Domingo. Las autoridades estadounidenses argumentan que su compra y uso representan una clara violación de las sanciones establecidas en 2019, tras la controvertida reelección de Maduro en 2018. La administración venezolana ha calificado la acción como un acto de “piratería”, exacerbando aún más las tensiones entre ambos países.

Paralelamente, el régimen de Maduro intensificó su represión política. El mismo día de la incautación, un tribunal venezolano emitió una orden de arresto contra Edmundo González Urrutia, quien cuestionó la legitimidad de las elecciones presidenciales del 28 de julio, en las que Maduro fue proclamado vencedor en medio de acusaciones de fraude. La fiscalía venezolana lo acusa de “desobediencia de leyes” y “conspiración”, delitos que según ellos, están relacionados con su postura crítica hacia el gobierno.

María Corina Machado, líder opositora, manifestó en sus redes sociales que esta acción sólo refuerza la unidad y el apoyo hacia González Urrutia, tanto dentro como fuera de Venezuela. Según Machado, la amenaza contra el “Presidente Electo” es una muestra de la desconexión del régimen con la realidad.