El Instituto Nacional Electoral anunció que se llevará a cabo un recuento de voto por voto en el 60% de las casillas de la elección presidencial del domingo pasado. Esto significa que al menos 102,388 de las 170,000 casillas instaladas serán sometidas a este proceso. La decisión se toma en el marco de la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales y responde a diversas causales previstas en la normativa electoral.

El consejero Martín Faz Mora, presidente de la Comisión de Organización Electoral del INE, aclaró que no hubo fraude por parte del instituto.

Explicó que el recuento de votos es un procedimiento normal y estipulado por la ley cuando se presentan ciertos escenarios, como la existencia de actas de escrutinio que registran votos únicamente para un partido, o cuando el número de votos nulos supera la diferencia entre el primer y segundo lugar. También se realizará el recuento en casos de errores o inconsistencias evidentes en las actas, o cuando no se encuentra el acta en el expediente.

Se estima que el recuento cubrirá el 60% de las casillas, aunque este porcentaje podría aumentar si los partidos solicitan más recuentos. El consejero subrayó que los errores de transcripción pueden ocurrir, especialmente debido al cansancio de los funcionarios de casilla durante el proceso de registro de votos. Estos errores se corregirán en los cómputos distritales que comenzarán este miércoles.

Faz Mora desestimó las afirmaciones de fraude electoral, calificándolas de “falsa narrativa”. Aseguró que cualquier inconsistencia será resuelta durante los cómputos distritales y destacó que las actas originales, firmadas por todos los partidos políticos presentes en las casillas, serán la base para estos cómputos. Insistió en que los errores de transcripción son comunes y se deben, en gran medida, a las condiciones bajo las cuales los funcionarios trabajan durante la jornada electoral.

 

Por Luis Martínez Alcántara.