Redacción

De acuerdo con la consultora global McKinsey & Company se pronostica una inversión extranjera directa de hasta $78.000 millones de dólares para 2032 en México debido a las inversiones estructurales provenientes del nearshoring,  Por esta razón es indispensable que para aprovechar esta oportunidad de crecimiento, las empresas del sector de transporte de carga se preparen adecuadamente para atender los retos que implica mover  mercancías, llevar materiales para construcción, así como toda la logística que se requiere para lograr fortalecer al sector adecuadamente.

Datos de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (CANACAR), indican que este sector aporta el 3.8% al Producto Interno Bruto (PIB) y moviliza más de 565 millones de toneladas de productos y mercancías. El estudio sobre cuota de transporte de carga de Mordor Intelligence, proyecta que la demanda de camiones de carga pesada en el país crezca a un ritmo compuesto anual (CAGR) de 5.23% entre 2025 y 2030, pasando de $45.73 mil millones de dólares en 2025 a $59.02 mil millones de dólares en 2030.

Ernesto del Blanco, director general de Elam Faw Trucks, empresa que ensambla y distribuye vehículos de carga en México, indica que “El transporte de carga pesada es un factor central en la cadena de valor, pero enfrentamos un reto en México al contar con una de las flotas con mayor antigüedad, este aspecto también puede representar un punto negativo al momento en que las empresas que buscan llegar a nuestro país se dan cuenta que el ecosistema de transporte puede no cumplir con normas o políticas internacionales. Por eso se requiere contar con una estrategia a largo plazo para el ensamblaje y fabricación de vehículos que respondan a las necesidades comerciales, no sólo de México, también de la región con una visión que apunte a la sostenibilidad y la incorporación de innovación a través de la tecnología que contribuya a la eficiencia energética de las unidades.

La producción de vehículos de carga pesada disminuyó, pero aún así el futuro es prometedor

La producción de vehículos de transporte de carga pesada en México registró una caída del 22.3% en el periodo enero–abril de 2025 respecto al mismo lapso de 2024, lo que equivale a 15,127 unidades menos en el parque nacional, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).

Para Ernesto del Blanco, esta baja en la producción de vehículos de carga pesada puede parecer apremiante, pero está rodeada de diversos factores que sacudieron a la economía mundial: “recordemos que la imposición de aranceles por parte del gobierno de Estados Unidos frenó la actividad comercial de buena parte del mundo, lo cual impactó a nuestro país, impuestos a materias primas e insumos como el acero tuvieron este tipo de efectos. Pero hay acciones que ayudarán a la consolidación de las inversiones que el nearshoring aún puede traer, una de estas acciones es la inversión de 53 mil millones de pesos en infraestructura carretera, de un total de 372 mil millones de pesos que se invertirán en este rubro durante todo el sexenio, anunciado por el secretario de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes de México, Jesús Esteva.”

La ventana que abre el nearshoring exige más que pronósticos alentadores, requiere que fabricantes, operadores y autoridades compartan la misma visión ante la inversión, eficiencia y sostenibilidad, al estar alineados, las oportunidades que aún se pueden recuperar ante la relocalización de las empresas en nuestro país darán un nuevo incentivo a la producción del transporte de carga pesada que México requiere.